La función permanecerá activada incluso si cierras el Administrador de tareas y lo vuelves a abrir
El Administrador de tareas es una herramienta indispensable en Windows 10 y es bueno tenerla a mano mientras solucionas problemas de tu PC. Con una simple configuración, el Administrador de tareas siempre permanecerá visible en la pantalla, sin importar cuántas ventanas tengas abiertas. Así es cómo.
Primero, debemos abrir el Administrador de tareas. En Windows 10, haz clic con el botón derecho en la barra de tareas y selecciona "Administrador de tareas" en el menú que aparece.
Si ves la interfaz sencilla del Administrador de tareas, haz clic en "Más detalles" en la parte inferior de la ventana.
En la ventana completa del Administrador de tareas, haz clic en Opciones → Siempre visible para activar el modo siempre visible. Aparecerá una casilla de verificación a la izquierda de la opción.
Después de eso, la ventana del Administrador de tareas siempre permanecerá encima de todas las ventanas abiertas.
La función permanecerá activada incluso si cierras el Administrador de tareas y lo vuelves a abrir. Y si más tarde deseas desactivar la función "Siempre visible", simplemente desmarca el elemento en el menú "Opciones". ¡Muy útil!