
Un canal lateral recién descubierto en un protocolo ampliamente utilizado permite a los atacantes falsificar dominios
En 2008, el investigador Dan Kaminsky reveló una de las amenazas a la seguridad de Internet más graves de la historia: una debilidad en el Sistema de Nombres de Dominio (DNS) que hizo posible que los atacantes enviaran en masa a los usuarios a sitios impostores en lugar de los reales que pertenecen a Google, Bank of America , o cualquier otro. Con la coordinación de toda la industria, miles de proveedores de DNS en todo el mundo instalaron una solución que evitó este escenario apocalíptico.