Aprovecha la idea de voltear bits al inyectar fallas en la CPU antes de que se escriban en la memoria
Un equipo de investigadores de ciberseguridad demostró una novedosa técnica más para secuestrar Intel SGX, un espacio de confianza aislado por hardware en las modernas CPUs de Intel que encripta datos extremadamente sensibles para protegerlos de los atacantes incluso cuando un sistema se ve comprometido.
Denonimado Plundervolt y rastreado como CVE-2019-11157, el ataque se basa en el hecho de que los procesadores modernos permiten que la frecuencia y el voltaje se ajusten cuando sea necesario, lo que, según los investigadores, puede modificarse de manera controlada para inducir errores en la memoria al voltear bits.